Un nuevo problema se plantea ahora. Pasado el fervor del cumpleaños y la felicidad de Emilio, ¿cómo logro ahora sacarle el traje de bomberos ?, que sin bromas, no se saca ni para dormir.....Porque siempre mi norte ha sido insertar al máximo a Emilio en la sociedad ... no hacerlo más raro ni más excéntrico. En el sentido que tiene que entender que es un juego, que no es bombero de verdad y que no puede andar en todas partes de casco, por que eso no es normal.... Difícil transar con las concesiones que quisiera darle para hacerlo feliz y las exigencias sociales de normalidad. Mi niño lindo... estaba tan ansioso antes de su cumpleaños, lamentablemente sus ansias las expresa golpeando y empaña nuesta armonía... pero ya ahora anda contento y más tranquilo. Al colegio lo dejaron ir sólo el día de su cumpleaños con el traje de bombero, eso me parece bien , imponer normas de funcionamiento, tengo que hacer lo mismo.
Complicado.
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